La ecología se ocupa
de las complejas relaciones de los organismos vivos con su medio. Desde el
momento que en ese complejo sistema, el ser humano deviene fundamental, se habla
de ecología humana.
Ernst Haeckel,
creador del término ecología y considerado el fundador de su estudio.
Finalidad De La
Ecología
La ecología es la
rama de la Biología que estudia las interacciones de los seres vivos
con su hábitat. Esto incluye factores abióticos, esto es, condiciones
ambientales tales como: climatológicas, edáficas, etc.; pero también
incluye factores bióticos, esto es, condiciones derivadas de las
relaciones que se establecen con otros seres vivos. Mientras que otras ramas se
ocupan de niveles de organización inferiores (desde la bioquímica y
la biología molecular pasando por la biología celular,
la histología y la fisiología hasta la sistemática),
la ecología se ocupa del nivel superior a éstas, ocupándose de las poblaciones,
las comunidades, los ecosistemas y la biosfera. Por esta
razón, y por ocuparse de las interacciones entre los individuos y su ambiente,
la ecología es una ciencia multidisciplinaria que utiliza herramientas de otras
ramas de la ciencia, especialmente geología, meteorología, geografía, sociología, física, química y matemáticas.
Los trabajos de
investigación en esta disciplina se diferencian con respecto de la mayoría de
los trabajos en las demás ramas de la Biología por su mayor uso de herramientas
matemáticas, como la estadística y los modelos matemáticos.
Además, la comprensión de los procesos ecológicos se basa fuertemente en los
postulados evolutivos (Dobzhansky, 1973).
ECOSISTEMA
Un principio central
de la ecología es que cada organismo vivo tiene una relación permanente y
continua con todos los demás elementos que componen su entorno. La suma total
de la interacción de los organismos vivos (la biocenosis) y su medio no
viviente (biotopo) en una zona que se denomina un ecosistema. Los estudios
de los ecosistemas por lo general se centran en la circulación de la energía y
la materia a través del sistema.
Casi todos los
ecosistemas funcionan con energía del sol capturada por los productores
primarios a través de la fotosíntesis. Esta energía fluye a través de
la cadena alimentaria a los consumidores primarios (herbívoros que comen y
digieren las plantas), y los consumidores
secundarios y terciaria (ya
sea omnívoros o carnívoros). La energía se pierde a los
organismos vivos cuando se utiliza por los organismos para hacer
el trabajo, o se pierde como calor residual.
La materia es
incorporada a los organismos vivos por los productores primarios. Las plantas
fotosintetizadoras fijan el carbono a partir del dióxido de carbono y del
nitrógeno de la atmósfera o nitratos presentes en el suelo para producir
aminoácidos. Gran parte de los contenidos de carbono y nitrógeno en los
ecosistemas es creado por las instalaciones de ese tipo, y luego se consume por
los consumidores secundarios y terciarios y se incorporan en sí mismos. Los
nutrientes son generalmente devueltos a los ecosistemas a través de la
descomposición. Todo el movimiento de los productos químicos en un ecosistema
que se denomina un ciclo biogeoquímico, e incluye el ciclo
del carbono y del nitrógeno.
Los ecosistemas de
cualquier tamaño se pueden estudiar, por ejemplo, una roca y la vida de las
plantas que crecen en ella puede ser considerada un ecosistema. Esta roca puede
estar dentro de un llano, con muchas de estas rocas, hierbas pequeñas, y
animales que pastorean - también un ecosistema-. Este puede ser simple en
la tundra, que también es un ecosistema (aunque una vez que son de este
tamaño, por lo general se denomina ecozonas o biomas). De hecho,
toda la superficie terrestre de la Tierra, toda la materia que lo compone,
el aire que está directamente encima de éste, y todos los organismos
vivos que viven dentro de ella puede ser considerado como una solo, gran
ecosistema.
Los ecosistemas se
pueden dividir en los ecosistemas terrestres (incluidos los ecosistemas de
bosques, estepas, sabanas, etc), los ecosistemas de agua
dulce (lagos, estanques y ríos), y los ecosistemas marinos,
en función del biotopo dominante.
FACTORES
ABIÓTICOS
Los factores
abióticos son los factores inertes del ecosistema, como la luz, la temperatura,
los productos químicos, el agua y la atmósfera.
FACTORES BIÓTICOS
Los factores
Bióticos son todos los organismos que comparten un ambiente.
Los Componentes
Bióticos son toda la vida existente en un ambiente, desde los protistas,
hasta los mamíferos. Los individuos deben tener comportamiento y
características fisiológicas específicos que permitan su supervivencia y su
reproducción en un ambiente definido. La condición de compartir un ambiente
engendra una competencia entre las especies, competencia que se da por el
alimento, el espacio, etc.
Podemos decir que la
supervivencia de un organismo en un ambiente dado está limitada tanto por los
factores abióticos como por los factores bióticos de ese ambiente. Los
componentes bióticos de un ecosistema se encuentran en las categorías de
organización en Ecología, y ellos constituyen las cadenas de alimentos en los
ecosistemas.
Cuando la
problemática ecológica es analizada a la luz de los deberes y obligaciones
morales, se han distinguido dos tipos de enfoques diferentes
"Ética del
ambiente o del uso del ambiente: se referiría a aquel enfoque en el que
únicamente los intereses de los seres humanos importan moralmente; sería una
ética homocéntrica aún cuando se considera como válido que el medio debe ser
usado de modo que la calidad de la vida humana, incluyendo las generaciones
futuras, pueda ser mantenida y mejorada.
"Ética
ecológica": supone admitir que seres no humanos puedan poseer valor
recognoscible en función del "todo biótico".
ÉTICA ECOLÓGICA
¿Qué debemos hacer
por nuestro planeta?
La sociedad del
bienestar en que vivimos nos ha acostumbrado a consumir, no ya lo que
necesitamos sino, sobre todo, aquello que no necesitamos. Esta
actitud consumista hace que nos olvidemos de que nuestros recursos
naturales son limitados, de que algunos se están acabando y que la consecuencia
será el fin de nuestra especie y el de otras muchas.
Nos encontramos, a
la vista de la situación ecológica del planeta, con que debemos aplicar a la
naturaleza y a los animales las mismas normas y derechos morales que hemos
aprendido a aplicar a los seres humanos, por ejemplo, es inmoral matar a las
ballenas, incendiar el bosque, torturar a un perro, etc. En este sentido, nos
encontramos diferentes teorías éticas defensoras de los derechos
medioambientales o Bioética, entre ellas podemos citar:
Las éticas
ecológicas superficiales, para las cuales hay que proteger a la naturaleza, no
por sí misma, sino porque de ella depende la supervivencia de nuestra especie.
La ética ecológica
profunda, por el contrario, afirma la defensa del medioambiente por sí mismo,
independientemente de los beneficios que nos reporte
Hans
Jonas quien en El principio de responsabilidad, nos recuerda
la responsabilidad moral que tenemos para con las generaciones
futuras, lo cual, nos lleva a que tenemos el deber moral de pensar
racionalmente en las consecuencias futuras de nuestras acciones sobre el planeta,
o lo que es lo mismo, no debemos destruir el planeta.
Cambiar nuestra
forma de vida consumista apostando por un consumo responsable, malgastando
menos, por ejemplo el agua y adecuando nuestras acciones al ritmo y
posibilidades de recuperación del planeta.
Reciclar y
reutilizar el papel, el vidrio, el metal o los plásticos evitando así el
despilfarro, la destrucción indiscriminada.
Contra la
contaminación, utilizar menos petróleo y carbón y más energías renovables y
limpias.
Sustituir los
fertilizantes y plaguicidas químicos por otros de origen natural.
Defender a los
animales y las plantas, todos formamos parte de un sistema en el cual, si una
de las partes entra en desequilibrio, las demás también, por eso es tan
importante la diversidad de la biosfera.
Tener una visión y
una relación ética de y con nuestro medioambiente desarrollando un
comportamiento moral que tenga en cuenta los derechos de la naturaleza.
Dar preferencia a la
conservación de la naturaleza, por delante de los intereses económicos y
políticos de los individuos particulares y de los Estados.
Frenar el desarrollo
tecnológico cuando la preservación de la biosfera esté en juego.
Holaaaa...que felicidad me da ver un blog tan lindo, temático e ilustrativo
ResponderEliminarFelicitaciones